lunes, octubre 27, 2008

no hay plazo que no se cumpla

llegó el día. uno de esos a los que temí tanto por tanto tiempo, en silencio, sin confesarlo ni a mi misma...
después de muchas, pero muchas discusiones, diferencias, altercados, siento que ya no tengo fuerzas.
he dicho en este rincón que muchas veces sentí que esta relación la sostenía emocionalmente yo. que yo me acercaba, que yo comenzaba de nuevo, que yo hacía la vista gorda a los gestos desagradables y las palabras duras (bueno, en honor a la verdad no soy yo quien dice lo siento a menudo, pero reparo con celo el mal causado, como decimos los leguleyos). y bueno, eso sigue tal cual y cada día más: este matrimonio anda bien cuando yo ando bien, porque soy imprescindible para el motor de partida aunque luego lo mantengamos en marcha juntos.
y hoy me cansé. ya no quiero comenzar otra vez. no es que tire la esponja y decida que no tiene vuelta, es sólo que no quiero ser yo quien de nuevo quien dé el primer paso, porque necesito sentir que mi lugar en este casa de verdad es mío, no que podría ser ocupado por cualquiera que cumpla mi rol.
estoy tan triste y tan cansada que creo que soy una lámpara en el living, soy un elemento decorativo de una vida ajena que decide en qué rincón me pone y si me prende o me mantiene apagada. tengo pena. tengo rabia. sobre todo tengo cansancio... de adentro, muy de adentro

7 comentarios:

Francisca Westphal dijo...

uf!!! amiga mía... ser el motor de marcha y partida no es fácil, especialmente porque no son dos lo que se suben a tu carro sino tres y uno de ellos ya es lo suficientemente grandote para andar solo. Me pasa a mi también... Porque si yo me caigo la vida no puede andar y parece que todo marcha mal? no son ellos también capaces de mantener el calor familia cuando no estamos TAN bien? Desde mi punto de vista, es una carga casi de género, a ellos les parece natural apoyarse en nosotras y que estemos SIEMPRE bien (o por lo menos con energía y buen ánimo a pesar de nuestros pesares). Es cierto, aunque no nos bajemos del carro, pucha que dan ganas dejar el manubrio para que sea el otro quién lo coja... besos querida Mara, y mucho ánimo...

Unknown dijo...

amiga mía, al parecer el cansancio nos ha pasado la cuenta a todos.
Al parecer la pena también ha llegado más lejos q de costumbre.

Mi vieja insiste en q lso añso bisieestos son de temr, y a mi me ha sresultado así, como el poto.

Lo único q espero querida coelga, es que deje de sentirse objeto de su casa para volver a ser la dueña y señora de su vida.

un abrazote grande y un beso apretado.

Ale dijo...

COlega la de arriba era yo q postié con el de mi viejita, jajaja.

Santiago Paz dijo...

Nada que decir. Sólo un enorme abrazo.

Beijos.


atte:
Paz

bufonazo dijo...

Mucha fuerza Mara...!

Y feliz cumple atrasadoooo...!

Un gran abrazo a la distancia!

Anónimo dijo...

sigue adelante amiga, siempre has sabiso salir de los problemas, y victoriosa!!!
un abrazo a la distancia.

te quiero mucho




kimy.

alma.verde:. dijo...

Quizá es extraño que lo diga, porque te conozco bieeen poco y nada, pero me pregunto si realmente tú escribiste eso.
Es decir, es obvio, pero no lo comprendo...es como tú sin ser tú.
No digo que no tengas derecho a sentirte así, y debas ser siempre fuerte...es sólo que, no me imaginaba esta parte de ti.
Como sea, espero que todo vaya mucho mejor (sea lo que sea que eso signifique)
besito :)