hablando de placeres culpables

de visita en el blog del cada vez menos desconocido y cada vez más interesante capitán futuro, reí de buena gana con una tangencial referencia a los placeres culpables en materia de música. en realidad, don cap quería hablar de sus gustos actuales, pero a propósito de eso refirió su pasado baladista-latino y yo acabé tarareando a Lucho Jara...
eso fue tipo hora de almuerzo. luego, al ir a buscar a mi hija alrededor de las 5, tuve mi diario periplo personal en la caminata de media hora hasta el Jardín y, como era el tema del día, pensé en mis placeres culpables.
de hombres no voy a hablar, por decencia y dignidad, que placeres culpables y tejado de vidrio tenemos todos. de comida, mi asibarítico sentido del gusto me dice que no existen placeres culpables sino sólo placeres y desplaceres. y como ya había pensado en los musicales, acabé en los televisivos. POR DIOS. VEO NOVELAS.

oh! acabo de enviar mi promisorio futuro de líder a la basura: "en el año 2007, la actual candidata a Concejala Marina Pizarro reconoció en su blog personal que veía, sin distinción, Grandes Maravillas Modernas, Los Bárbaros, los programas de recetas del El Gourmet y telecebollas como La despojada y Abandonada a su suerte..."

ok, démosle contexto a eso. no soy muy buena para ver tele por un grado moderado de hiperkinesia y porque tengo una hija, oficina, hago clases y ni siquiera tengo nana, así que hago camas, lavo platos, paso aspiradora... así es que no soy de las que pueden comenzar a ver la novela post noticiero del mediodía y apaguen la tele al acabar la repetición de la novela nacional que no alcancé a ver a las 8. digamos que es la de las 8 la que ha sido mi remanso de paz desde tiempos de la universidad, porque era la hora a la que llegaba a la casa y me aperaba frente a la tele del living con mi bandejita del almuerzo saltado.
he visto a claudia di girólamo, a tamara acosta, a mane sweet, a francisco reyes, a jorge zabaleta y a néstor cantillana hacer tantos papeles que ni siquiera puedo identificarlos con algún personaje en particular. y qué tanto, si podía atorarme de la risa con los personajes caricaturizados del canal nacional o sufrir por penas que jamás llegaría a tener y justificar mi pequeño resentimiento social en las diferencias de clases del canal católico
pero llegaron las novelas nocturnas y me cagaron!!! porque cómo acomodo mi horario y mi vida familia pa enchufarme a la tele a las 8 (ahora intento vivir con 10, de chilevisión, pero el personaje de Willy Semler está demasiado violento y grosero como pa que la Cata lo escuche siquiera, así q pasó cambiándola y ya me estoy enchufando con el transplante de corazón de la Lewin y "el piano" de la Paty López) y no soltarla hasta la medianoche, porque no se puede ser abogada y profe sin saber lo que pasa en el mundo, así que necesito el noticiero, y después alguien te mira... ya son las 11 de la noche y, si he tenido que cambiar la novela de chv por las chuchadas y amenazas, entonces puedo caer en la repetición... y capaz que me parezca interesante el invitado de paulsen a última mirada y ahí me dio la 1 de la mañana

recuerdo que cuando esperaba a la Cata, me propuse formalmente dejar de ver novelas pa que no tuviera imágenes distorsionadas de la realidad (o un choque tan frontal con la misma) desde tan chica. pero no puedo, me gusta el cebolleo. y, total, las historias suelen ser un poco lentas y predecibles, así q con que las vea una vez por semana estamos al día. hay hasta resúmenes por internet en las webs de los canales

supongo q me voy a relajar y me propondré que los gritos de la eloísa solé y los medio desnudos de panchito pérez-bannen (mijito rico) serán los últimos que veré por un tiempo. con 2 críos ya no voy a poder, en el recreo voy a querer dormir